La confianza de los consumidores descendió ligeramente en mayo, tras haber aumentado ligeramente en abril, y ese descenso se debió exclusivamente a la percepción de una relajación de las condiciones del mercado laboral, según un informe The Conference Board.
Por el contrario, las opiniones sobre las condiciones empresariales actuales, que tienden a adelantarse a la evolución del empleo, mejoraron, aseguran los expertos.
En general, el Índice de Situación Actual se mantiene en niveles fuertes, lo que sugiere que el crecimiento no se contrajo más en el segundo trimestre.
Con estos datos puede verse que al debilitarse aún más el Índice de Expectativas, “los consumidores tampoco prevén que la economía cobre fuerza en los próximos meses”, dice el informe.
Se espera que las condiciones del mercado laboral se mantengan relativamente fuertes, lo que debería seguir apoyando la confianza a corto plazo.
Mientras tanto, las intenciones de compra de los consumidores, tanto de bienes duraderos como de algunos servicios discrecionales en persona, se enfriaron debido al aumento de los precios y a la subida de los tipos de interés.
De hecho, el 33% de los consumidores ha pospuesto las mejoras en el hogar y casi el 30% ha pospuesto la compra de un automóvil. De cara al futuro, The Conference Board espera que el aumento de los precios y las nuevas subidas de los tipos de interés sigan suponiendo riesgos a la baja para el gasto de los consumidores este año.